Bonjour. Au revoir.

Hey chicos! Con este texto he ganado un premio en mi instituto! A ver que os parece :)

Al principio, lo primero que vio fue una luz, tan brillante que no podía abrir los ojos.

Se echó para atrás mirando sin saber qué hacer.

Estaba confundido.

Lo único que podia sentir era miedo o simple curiosidad, ya que no sabía qué pasaría después.

Ahí arriba le habían dicho que todo era difícil pero que pasara lo que pasase no se rindiera.

¿Qué significa aquello? Miraba a su alrededor y lo único que lo tranquilizó fueron unos ojos marrones que lo observaban detenidamente.

"Bueno" pensó, "mientras esté ella aquí, no me rendiré, signifique lo que signifique y pase lo que pase".

Al final, vio de nuevo la misma luz.

Era exactamente la misma que vio mucho tiempo antes.

Pero ahora no estaba confundido, simplemente esperaba impaciente la llegada de algo más.

Siempre se lo habría imaginado pero nunca lo vio tan de cerca.

Lo deslumbraba pero le gustaba el calor que desprendía al tocar su cara.

Lo único que tenía que hacer era dar unos pasos y ya estaría allí.

Donde muchos empiezan y todos terminan.

Y entonces echó la vista hacia atrás.

Supuso que todo estaría bien, que no se acababa el mundo con él, aunque le doliera pensarlo.

Cuando giró de nuevo la cabeza, se sorprendió.

Allí estaban de nuevo los ojos marrones que lo vieron nacer.

De pronto, sonrió, y ya no se preocupó.

Estaría bien y todos los demás también.

De eso ya se encargaría él, igual que lo hizo la mujer de los ojos marrones que le esperaba tras la luz.

Ahora ya no cabía ninguna duda.

Dio los pasos y cerró los ojos.

Para siempre.